[Abajo anexo audiocuento narrado por mí, para todo aquel que guste acompañar su lectura con la narración dramatizada en audio]
Pesadilla a la inversa
eguro les ha pasado alguna vez que están a mitad de un horrible sueño, de una pesadilla que toca sus más profundos y dolorosos miedos, y, cuando todo parece estar a punto de derrumbarse ante el caos, el corazón les da un brinco tan desesperado que logran abrir los ojos.
Poco a poco van calmando la respiración, acostumbrando la mirada a la oscuridad, relajando los músculos, y se van dando cuenta de que siguen en su habitación, cerca de sus seres queridos. Es ahí cuando sueltan un suspiro: “¡Qué alivio!” y más que venir de los pulmones, viene de las entrañas. “Fue solo un sueño, no fue nada.”
En mi caso fue igual todo esto, pero a la inversa.
“Es solo un sueño, es solo un sueño” me repetía primero, desorientada; no acompañada de suspiros sino de gritos, que aún ajenos a mi consciencia sí surgían de mis entrañas, desgarrando todo a su paso con el frenesí de una motosierra.
Mis músculos, después de quién sabe cuántas horas inmovilizados, aun fríos y entumecidos, ¡Auch! ¡Hormigueando!, no demoraron ni un instante en tensarse y recogerse bajo los dedos del monstruo, que se deslizaban bajo la panti, húmedos y retorcidos como sanguijuelas.
Mis ojos estaban vendados, pero igual la vista se me acostumbró a la oscuridad, y la oscuridad me fue llevando a la pesadilla.
En los momentos dolorosos se me dibujaban figuras tras los párpados, la mayoría chillonas, deformes, y agresivas; sombras colosales, hambrientas, y bañadas en sangre ajena… Mi único consuelo estaba en unos breves flashes de luz que obtenía cuando el dolor llegaba con su máxima fuerza, y lograba atisbar en ellos a mamá, a papá, a los amigos del colegio, y hasta a la habitación en la que deseaba haber despertado.
De mi ingenua lucidez me arrancó el monstruo, con peludas y toscas caricias, y mi respiración se aceleró, aturdiendo mis sentidos y quemando la garganta al pasar, como una sinfonía venenosa. Fue un caso perdido intentar calmarla después de eso; se quedó en tal delirante crisis asmática durante toda la pesadilla, en eterna y desbocada competencia con el ritmo cardíaco.
Hasta que de pronto tuve la mano del monstruo en el cuello.
Apretaba fuerte, aunque no tan fuerte. Un poco más fuerte que una gargantilla, sí, un poco más fuerte que una corbata; un poco más fuerte que un collarín, seguro; un poco tan fuerte como para matar a un pollo y colgarlo por las patas. Pero a mí no me mató. Más bien me hizo un favor: me calmó la respiración.
“Mamá… si uno tiene una pesadilla a la inversa…” aproveché de preguntarle al intermitente flash de luz “De esas que comienzan cuando te despiertas… ¿en qué termina?”
urely it has ever happened to you that you are in the middle of a horrible dream, of a nightmare that touches your deepest and most painful fears, and, when everything seems to be about to collapse in the face of chaos, your heart gives such a desperate leap that you manage to open your eyes.
El flash de luz no me contestó. Al cabo de un rato se difuminó en silencio y se llevó consigo el resto de las sombras y figuras. La absoluta negrura que le reemplazó me susurró su respuesta. ¡Ah! Por fin, el alivio…
[Below I attach the audiostory narrated by me, for those who would like to accompany their reading with the dramatized audio narration].
Nightmare in reverse
urely it has ever happened to you that you are in the middle of a horrible dream, of a nightmare that touches your deepest and most painful fears, and, when everything seems to be about to collapse in the face of chaos, your heart gives such a desperate leap that you manage to open your eyes.
Little by little you find your breathing calming down, your eyes getting used to the darkness, your muscles relaxing, and you realize that you are still in your room, close to your loved ones. That's when you let out a sigh: "What a relief!" and rather than coming from the lungs, it comes from the gut. "It was just a dream, it was nothing."
In my case it was all the same, but in reverse.
"It's just a dream, it's just a dream" I repeated to myself first, disoriented; not accompanied by sighs but by screams, which although unconnected to my consciousness did emerge from my entrails, tearing everything in their path with the frenzy of a chainsaw.
My muscles, after who knows how many hours of being restrained, still cold and numb, Auch, tingling, did not delay an instant to tense up and retract under the monster's fingers, which slipped under the panties, wet and twisted like leeches.
My eyes were blindfolded, but my sight got used to the darkness anyway, and the darkness gradually led me to the nightmare.
In the painful moments, figures were drawn behind my eyelids, most of them screaming, deformed, and aggressive; colossal shadows, hungry, and bathed in other people's blood... My only comfort was in some brief flashes of light that I caught when the pain was at its strongest, and I managed to glimpse mom, dad, school friends, and even the room in which I wished I had woken up.
From my naïve lucidity the monster tore me away, with hairy, rough caresses, and my breathing quickened, dazing my senses and burning my throat as it passed, like a poisonous symphony. Trying to calm it down after that was a hopeless case; it stayed in such a delirious asthmatic crisis throughout the whole nightmare, in eternal, unbridled competition with the heart rate.
Until suddenly I had the monster's hand on my neck.
It squeezed hard, though not that hard. A little harder than a choker, yes, a little harder than a tie; a little harder than a neck brace, sure; a little hard enough to kill a chicken and hang it by its legs. But it didn't kill me. Rather, it did me a favor: it calmed my breathing.
"Mom... if one is having a nightmare in reverse..." I took the opportunity to ask the intermittent flash of light "One of those that start when you wake up... what does it end in?"
The flash of light did not answer me. After a while it faded into silence and took along with it all the rest of the shadows and figures. The absolute blackness that replaced it whispered its answer to me. Ah! At last, the relief...
Cuento, audiocuento e ilustración originales de Ni de Cabeza.
Original story, audiostory and illustration by Ni de Cabeza.
Muchas gracias por leer!
Thanks for reading!
❤️🍀
Créditos - Credits
Edición de portada / Cover editing: Adobe photoshop
Escobita voladora / Flying broom - Vector de Dibujos animados creado por brgfx - www.freepik.es
Sombrero con cuaderno / Witch hat with book - Vector de Libro creado por brgfx - www.freepik.es
Letras mayúsculas / Capital letters: Grusskarten Gotish font from dafont
Castillo volador de firma / Signature flying castle Изображение my best in collections - see and press 👍🔖 с сайта Pixabay
Traducción al inglés / English translation: DeepL versión gratuita -