Cómo Duelen
Es una lucha constante, una batalla interminable que nos desgata emocionalmente, que a veces sentimos que hasta nos quita la paz y el deseo de continuar.
Cómo nos cuesta librarnos, deshacernos de todos esos pensamientos que nos torturan, que nos aflijen y nos abruman hasta casi perder la cordura.
Cuando nos atrapan y nos envuelven quedamos agotados sin deseos de seguir luchando, es algo más fuerte que nosotros mismos, nos sentimos en un abismo.
Perdemos el valor, el entusiasmo y hasta nuestro optimismo, es algo increíble porque
nos queremos resistir y aún así los malos pensamientos persisten.
Hay que luchar con todas las fuerzas y tener a ese alguien especial que nos escuché al hablar,
que sin juzgar nos abrace tierna y compasivamente.
Si a pesar que duelen mucho y nos hacen mucho daño, hay que seguir luchando, sobreponernos hasta vencerlos y así continuar viviendo.
Gracias infinitas doy a Dios, a todos mis seres amados y amigos cuento incondicionalmente con ellos, eso me conforta y me da aliento para seguir resistiendo.