Refulgente está el señor
del cielo, iluminando los
caminosTestigo de las Eras, amante
fiel de la Luna, feroz enemigo
de las tinieblasDesde las alturas, enriquece
la vida en la Tierra, acariciando
su faz con sus manos de fuego.
Refulgente está el señor
del cielo, iluminando los
caminosTestigo de las Eras, amante
fiel de la Luna, feroz enemigo
de las tinieblasDesde las alturas, enriquece
la vida en la Tierra, acariciando
su faz con sus manos de fuego.